“El domingo me ocuparé de alentar”

Jesús Soraire, quien está suspendido y no podrá disputar la última fecha, habló en exclusiva con Solo Ascenso. “Estoy pensando en el finde como si fuera a jugar”, admitió.

Publicada: 18/04/2019 20:46:58

Lecturas: 1022

Arsenal tuvo que ver desde afuera lo que pasaba con sus rivales, y tuvo la fortuna de que los resultados se le dieran casi a la perfección. Ahora, es momento de volver a la acción y el plantel entrena con la cabeza puesta en el duelo con Defensores de Belgrano, donde se definirá el futuro del equipo. Sin embargo, hay un futbolista que jugó todo el torneo y no podrá hacerlo el domingo: Jesús Soraire, suspendido por quinta amarilla.

El volante, que sabe que tendrá que ver desde afuera un partido más que sus compañeros, habló en exclusiva con Solo Ascenso y contó cómo vivió el encuentro entre el Torito y Sarmiento de Junín el pasado lunes. “Tranquilo, deseando que gane Chicago, obviamente, pero sin perder la tranquilidad”, comenzó.

Siempre muy mesurado, el tucumano señaló: “En realidad, no dependemos de nosotros, dependemos también del resultado de Sarmiento. Y no es presión. Lógicamente, queremos el premio mayor, pero siempre tuvimos los pies sobre la tierra que el objetivo con el se armó este plantel era otro. Hoy llegar con chances de coronar fue el resultado del esfuerzo y humildad con la que trabajamos a lo largo de este torneo. Así que para nosotros no es ni una presión ni un relax, es un premio y pensamos disfrutarlo”.

“Como todo juego, el factor fortuna o suerte juega su rol. Nos tocó ahora la buena, pero también nos tocó la mala fortuna de sumar cuatro puntos de quince posibles unas fechas atrás”, sostuvo el Tucu. Y añadió: “El domingo me ocuparé de alentar a mis compañeros, porque primero tenemos que ganar y después veremos qué ocurre. Siempre con la humildad y tranquilidad que caracteriza a este grupo”.

El mediocampista admitió sobre su semana: “La verdad que es raro, porque estoy pensando en el finde como si fuera a jugar. Después me acuerdo de la quinta amarilla y me bajonea, pero en seguida pienso que las cosas suceden por algo y que también cualquiera de mis compañeros que le toque jugar bien merecido lo tiene. Porque, si este grupo llegó con chances a la última fecha, fue porque los chicos que jugaron poco, o algunos nada, entrenaron y empujaron con igual o más fuerzas e intensidad que los que jugamos habitualmente. Y eso obliga a que nadie se relaje y la competencia sea sana, con un mismo fin. Así que son muchas más las razones para estar contento que para estar bajón, más allá que no me toque jugar feliz por el compañero al que le toque jugar”.

Mariano Perusso