Alegría de último minuto

El Aurirrojo pasó por todos los estados de ánimo en la noche correntina, pero finalmente pudo derrotar agónicamente a Crucero del Norte para sumar su primer triunfo.

Publicada: 15/09/2018 00:50:12

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Boca Unidos luchó hasta el final y tuvo su recompensa. De la mano del "Emperador" Cáceres y del "Negro" Núñez derrotaron 2-1 a Crucero del Norte por la segunda fecha del Federal A.

La noche parece haber estado guionada. Por momentos con destellos de felicidad, por otros de sufrimiento y, en la agonía del partido, el desahogo. Cristian Núñez y Julio Cáceres, uno en cada tiempo, inflaron las redes para arrancar con el pie derecho la campaña en condición de local.

El partido no fue de los más atractivos. Como sucedió en la primera jornada, los equipos salieron al campo de juego con la guardia alta, estudiando a su rival y sin tomar riesgos. Aunque, claro, el más "obligado" era el equipo local, que debía sumar de a tres para hacer "valer" el punto cosechado en Resistencia.

A los 18' del primer tiempo iba a llegar la apertura del marcador. El Aurirrojo probó mucho desde la vía aérea y tuvo su rédito; la pelota le quedó a Fabio Godoy por el sector derecho, quien envió un centro bombeado al área y allí estaba Cristian Núñez para el cabezazo a contrapierna del arquero Marcos Argüello.

A partir del gol, Boca Unidos empezó a soltarse y sentirse más cómodo. Manejó la pelota a gusto y placer, aunque sabía que Crucero tenía jugadores de buen pié y en todo momento no podían bajar la guardia. El claro ejemplo pasó a los 34', cuando Franco Cabrera probó desde larga distancia y la pelota se fue desviada al córner.

Dos minutos antes, Gustavo Mbombaj había tenido en sus pies la chance de aumentar la ventaja. El lateral-volante se escapó solo por izquierda y no estuvo certero en la definición. El primer tiempo finalizó con buenas sensaciones para el dueño de casa.

En el complemento, Sandro Bárbaro decidió mover rápidamente su banco y poner sus cartas sobre la mesa. A los 22 minutos, un tiro libre lejano y colgado de Martín Fabro terminó siendo peligroso para Argüello, que alcanzó a desviarla cuando la número 5 se le metía en su valla. No hubo mucho más en los primeros minutos de la etapa final.

Lo atractivo llegaba a lo último. Las variantes le funcionaron al entrenador visitante, porque Osvaldo Miranda e Ivan Molinas empezaron a darle frescura a los ataques misioneros. Y en contrapartida, el anfitirón empezó a replegarse inconscientemente ante la arremetida -aunque sin tanto peligro- de Crucero. Justamente Miranda, a los 36 minutos, encontró el empate en un cabezazo que ingresó de manera milimétrica besando el palo izquierdo de Alejandro Medina.

Y así como las modificaciones en el elenco amarillo tuvieron su rédito, los ribereños también lo aprovecharon. Gerardo Maciel y Julio Cáceres ingresaron y repitieron la dupla que terminó jugando ante Chaco For Ever. Parecía que moría en igualdad el encuentro, pero aún había más.

A falta de un minuto para los 45 reglamentarios, Mbombaj recibió la pelota luego de un rebote. Se perfiló, mandó el centro y apareció el "Emperador" anticipándose a todos los defensores Colectiveros y hasta al propio arquero Argüello para marcar de cabeza en el primer palo. Solo se desató desahogo y mucha tranquilidad, sobre todo en el cuerpo técnico.

El equipo de la Ribera no pasó sobresaltos en los instantes finales y pudo sostener el marcador a favor. Triunfazo: por el rival, que venía de ganar en su debut, y porque no puede darse el gusto de regalar puntos en su reducto. La semana sigue siendo corta y los partidos se ajustan cada vez más; los festejos durarán horas, porque el lunes partirán hacia Tucumán para visitar el próximo miércoles a San Jorge.