Primera B | Platense

Difícil que se vaya

Si bien es cierto que Cobreloa de Chile hizo un pequeño sondeo por Jorge de Olivera (foto), las posibilidades de que el arquero del Calamar cruce la cordillera son remotas.

Publicada: 05/01/2018 10:38:26

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Llegó casi en silencio, procedente desde Colombia, más precisamente desde el Deportivo Pasto, sobre el comienzo del campeonato, teniendo que ocupar el arco del Marrón que luego de la partida de Ezequiel Mastrolía. Se sabía de que no iba a ser para nada fácil reemplazar al Mono, y hacerle olvidar al hincha su nombre. No era para cualquiera.

Así fue como Dida apareció en Platense, y desde aquella tarde en Vicente López cuando el Calamar derrotó por 2-0 a Defensores de Belgrano, el ex arquero de Racing, entre otros, empezó a mostrar mucha seguridad, y en poco tiempo fue convenciendo a la parcialidad del Marrón.

El misionero, dueño de manera indiscutida del arco hoy, tiene una extensa trayectoria como futbolista, y además de haber jugado por ejemplo en Nueva Chicago y Racing en la Argentina, ha pasado por las ligas de Paraguay, Colombia y Chile. En el país trasandino defendió el arco de los Zorros del desierto, o sea el Cobreloa, el equipo Naranja del norte, aquel que a pocos años de haber sido fundado llegó a jugar dos finales consecutivas de Copa Libertadores en 1981 y 1982, cayendo ante Flamengo y Peñarol respectivamente.

Su paso por este club dejó buenos recuerdos en el seno del club minero, que en la actualidad se encuentra en la Segunda División del fútbol chileno, y que lucha por volver cuanto antes a Primera. Para eso, y a diferencia de la liga de nuestro país que finaliza a mitad de año cada temporada (en Chile se juega de enero a diciembre) los dirigentes calameños se comunicaron con el entorno del portero para intentar conseguir los servicios de Dida, pero se encontraron con que su contrato termina en junio próximo por el motivo antes mencionado, lo que anularía las aspiraciones de Cobreloa.

Ahora bien, una manera de que eso se solucione para el club chileno, sería rescindir su contrato (hoy parece imposible dado su muy buen nivel) o que la dirigencia Naranja haga un ofrecimiento económico para llevárselo (también inviable por el flojo momento en ese rubro del club trasandino). Si bien en el fútbol pocas cosas son seguras, parece casi imposible el desembarco de Jorge de Olivera en Chile, por lo menos antes de junio, y seguramente culmine la temporada defendiendo el arco de Tense.

Norberto Brotzmann

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