Rompió el maleficio: Atlanta avanzó en el Reducido

En un partido cargadísimo de emociones, el Bohemio venció a San Martín de Tucumán 4-1 en los penales, luego de igualar 2-2 en el partido. Marcioni y Rago, las grandes figuras.

Publicada: 17/01/2021 20:09:28

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Atlanta y San Martín de Tucumán jugaron un gran encuentro en Río Cuarto, y el Bohemio terminó imponiéndose por 4-1 en los penales, luego de levantar dos veces el resultado en contra para finalizar 2-2, gracias al agónico empate de Marcioni. Para los de Villa Crespo, es la primera vez en décadas que avanzan de ronda en un Reducido.

Si bien entre hinchas del Santo y el Bohemio hay cierta hermandad por la sensación de robo de la AFA, eso no se trasladó a las delegaciones, donde la tensión era enorme. El partido se jugaba como un clásico, con mucha pierna fuerte, garra y poco fútbol; lo cual derivó en que el primer tiempo fuera aburrido, donde lo más entretenido eran las piernas fuertes. Atlanta parecía mostrar un poquito más de criterio para crear, pero no llegaba a buen puerto. Durante los 45 iniciales, los arqueros fueron espectadores.

En el complemento pasó de todo. A los 3 minutos, y sin haber hecho demasiado, San Martín se puso en ventaja con una buena aparición de Ricardo Noir, que definió con sutileza al segundo palo. En el momento no se reclamó mucho, pero el exBoca partió casi un metro adelantado. La polémica sí se instaló a los pocos minutos, cuando Franklin cobró un empujón en el área y sancionó penal para Atlanta. La infracción existió, pero fue de esos penales que no suelen cobrarse. Lo cierto es que Milton Giménez cambió la chance por el 1-1.

Si San Martín llegaba condicionado por todo lo que le ocurrió en el último tiempo, la designación de Franklin no ayudó demasiado. Aunque el juez no pareció tener grandes fallas en el encuentro, sus antecedentes lo condenan, y los tucumanos estallaron de bronca tras el empate, protestando por el penal. Fueron momentos de puro nerviosismo para los de Gómez-Orsi, que incluso se quedaron sin uno de los entrenadores porque Favio vio la roja.

Parecía que el Bohemio podía aprovechar ese estado de San Martín para sacar ventaja, pero el que se adelantó de nuevo fue el Santo. Una gran pelota filtrada de Costa para Noir, que esta vez picó habilitado, encontró a Rago saliendo lejos a anticipar con la cabeza. Pero su rechazo fue directo a los pies de Tino Costa, quien de primera la clavó por encima del arquero y sus defensores. Golazo para poner el 2-1 y tirarle la responsabilidad al Bohemio los veinte minutos finales.

Pipa Cassano no se anduvo con dudas, y arriesgó. Arrancó con el ingreso de Oyola por Pedrozo, y Dramisino por Fernández; y más adelante puso a Marinucci por Ochoa Giménez (había gastado el primero en el ingreso de Pérez por Perales, lesionado). Todo era ir a buscar el empate, aunque dejara espacios atrás. El ingreso del Pony terminó siendo determinante: las dos veces que estuvo mano a mano con su marca, generó peligro. En la primera no pudo definir Milton Giménez, pero en la segunda apareció por el fondo Marcioni para poner el 2-2, cuando se jugaba el primer minuto adicionado. Se jugaron cinco minutos más, y todo fue a definirse desde los doce pasos.

En los penales, la gran figura fue Rago, que le atajó dos muy buenos disparos a Tino Costa y a Ramiro Costa, a puro reflejo. Aunque sería injusto no destacar la enorme decisión con la que patearon Milton Giménez, Leonardo Marinucci, Nicolás Previtali y Julián Marcioni, que no le dieron chance a Arce incluso cuando adivinó. La infalibilidad de Atlanta y su arquero le terminaron dando la clasificación por 4-1 en los penales.

Así, el Bohemio le puso fin a una maldición en la que se despedía de los Reducidos en la primera ronda. Ahora será cuestión de esperar rival para el próximo encuentro. Falta que se jueguen todos los partidos, y luego los ganadores se ordenarán según la cantidad de puntos que obtuvieron en la primera etapa, para crear los cruces.

Mariano Perusso