Solo Ascenso | Opinión

Alfaro, del ascenso al mundo

Un DT producto del ascenso

Publicada: 21/11/2022 14:58:32

“Me siento un producto genuino del ascenso argentino, del fútbol regional. Desde ahí llegué acá”, fueron las palabras en conferencia de prensa de Gustavo Alfaro, entrenador de la Selección de Ecuador que actualmente participa de la Copa del Mundo Qatar 2022 y que venció en el debut al equipo local por 2-0.



El conjunto ecuatoriano, encabezado por el DT argentino, se ilusiona con realizar un muy buen campeonato a base de esfuerzo y sacrificio. Mismas características que el propio Alfaro experimentó, adquirió y desarrolló, en las canchas del fútbol de ascenso argentino.

Con tan solo 18 años, Gustavo Alfaro inició su carrera como jugador en la Liga Rafaelina con la camiseta de Atlético Rafaela. Un aguerrido volante central de marca, que en ese momento alternaba el fútbol con su otra pasión, los libros, y el estudio de ingeniería química.



Pero su carrera como futbolista se terminó a los 28 años, y desde allí en más se enfocó en la enseñanza de lo aprendido. Desarrolló sus virtudes para la docencia, y fue la Crema quien le dio las primeras oportunidades como entrenador de inferiores, y luego como ayudante de campo de Carlos Biasutto.

Los promedios eran un problema para Atlético Rafaela en la temporada 1994 de la B Nacional, y Lechuga tuvo su debut como DT en un interinato. Triunfos ante Unión de Santa Fe y el Deportivo Morón, le permitieron a la Crema mantener la categoría y le dieron a Alfaro su primer pequeño gran logro.



Ya con un respaldo dirigencial y como DT confirmado de Atlético Rafaela, Gustavo Alfaro hizo ilusionar a la Perla del Oeste santafesino con un subcampeonato en el Nacional del 95. En semifinales, San Martín de Tucumán eliminó a la Crema y terminó con el primer ciclo de Alfaro en la institución.

La carrera de Alfaro continuó en un grande de la categoría, Olimpo de Bahía Blanca, donde tuvo su primera desilusión. Tras una discusión con el presidente del club, Jorge Ledo, dejó su cargo apenas 20 días después de haber asumido y sin poder debutar.




El viejo Argentino A apareció en el camino del entrenador y al mando de una institución que se preparaba para pegar el salto años después. Patronato de Paraná, donde realizó una muy buena campaña en el campeonato 97/98. 16 partidos sin conocer la derrota para el Patrón, que en esa temporada se quedó en las puertas del ascenso al Nacional.

De regreso a casa, para los años 2000 Alfaro estuvo al frente nuevamente de Atlético Rafaela donde volvió a meter a la Crema en instancias de definición de campeonato. Más de 50% de efectividad como DT del conjunto de Rafaela en cerca de 200 partidos, donde acarició el ascenso otra vez, pero no lo pudo concretar.




Después de tantos sin sabores y quedarse varias veces en las puertas del éxito, Alfaro tuvo su primer título como entrenador al frente de Olimpo de Bahía Blanca en el año 2001. El DT fue ovacionado en el Roberto Carminatti, pero días después fue despedido por el presidente de la institución que quería un entrenador con perfil de “primera” para el próximo año.



Lechuga Alfaro tuvo revancha al año siguiente, como entrenador de Quilmes. El DT logró el ascenso con el Cervecero que regresó de esa forma a la elite del fútbol argentino, y automáticamente tuvo la renovación para ser el DT en Primera. Fue lo último del “Profesor” en el ascenso argentino.

De ahí en más, la historia conocida. Alfaro se ganó un lugar, con esfuerzo y sacrificio, que en la actualidad lo tienen como uno de los entrenadores más destacados del continente. Ecuador disfruta de un DT, 100% producto del ascenso argentino.


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